martes, 15 de julio de 2008

Brain Damage

Mentira, me dueles.

Como el tiempo duele y la saliva.

Mientras toco el vértice del tiempo

hago mío el mar de tus desvelos,

posesión marcada por la carne.

Devoro el ayuno de tus ojos, eternamente

insatisfecha de esta voracidad maldita.

Delimitando ansiosa mi llegada, te grito,

a ti, que escuchas lo mineral del verso.

Sólo a ti te hacen sombra las alas de los árboles

y a ti te engendra el viento en los ojos de mi ensueño,

sólo a ti no te quiero cansada de esperar

el fuego.

Dolorosamente confesaré que quiero lacerarte

el cuerpo

como me has lacerado el alma.

No hay comentarios: